Usura, dice el diccionario de la RAE que es el interés que se lleva por el dinero, teniendo otras acepciones o significados, tales como el interés excesivo en el préstamo, o la ganancia, fruto, utilidad o aumento que se saca de algo, especialmente cuando es excesivo.
El Papa Francisco, que nos sorprende cada día con un lenguaje nuevo y alejado del sagrado canon del Estado Vaticano, en la audiencia general del pasado miércoles dejó dicho: "cuando una familia no tiene ni para comer porque tiene que pagar el préstamo a los usureros, eso no es cristiano, es inhumano" (sic).
A mi me ha recordado algo que me llamó la atención en su momento y cuyo significado me ha perseguido. El Padre Nuestro o "Pater Noster", que según el evangelio de Mateo, (Mt 6:9-13), fue dictado por Jesús de Nazaret, nos dice en una parte del mismo;
"Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden"
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden"
Pero antes este texto nos decía otra cosa muy distinta:
....................................
"perdona nuestras deudas
así como nosotros perdonamos a nuestros deudores"
....................................
Los no tan jóvenes recordamos bien los escándalos del Banco Vaticano, como accionista mayoritario del Banco Ambrosiano, Roberto Calvi, el todopoderoso Cardenal Macinkus, Michele Sindona, la Logia Masónica Propaganda Dos, Licio Gelli y un largo etcétera. La nunca esclarecida muerte del Papa Juan Pablo I se cree que pudo deberse a este conglomerado y su intención de cortar por lo sano.
En 1988 el arzobispo de Toledo y Presidente de la Comisión Episcopal, cardenal Marcelo González Martín, que era de Valladolid, y que en diciembre de 1960 había sido nombrado obispo de la diócesis de Astorga, comunicaba los retoques linguísticos en el texto de esta antiquísima oración como "pequeños cambios que son muy gratos al oído" (sic).
¿Qué puedo decir yo?. "El que tenga oídos para oír que oiga", (Mc 4, 21-25).
¡¡Un buen trabajo!!
ResponderEliminarNo cabe duda que si Nuestro Señor Lo dictó "perdona nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores", lo hizo por algo, y como bien se deja claro en el MC4, 21-25, la luz del candil ha de estar en el lugar idóneo para que aporte toda la claridad posible.
La aptitud del Papa Francisco es la positiva, acercando la luz y la verdad por mucho que resplandezca una y por dura que sea la otra . El PATER NOSTER descafeinado y/o maquillado que nos han traído desde el año 88 como “pequeños cambios que son muy gratos al oído" deja clara, cuando menos, una posición de levedad que arruina toda la Luz que se le quiso dar en origen y que, visto así, vuelve a retirar a la Iglesia del conflicto con el “Gordo” que está sentado a la izquierda y con el que , de pie, reparte al rico y se olvida del escuálido pobre. Justo al contrario de lo que se espera, pero es algo a lo que ya estamos un tanto acostumbrados; lo hemos visto o sentido en tantas ocasiones…, Pregúntese si no a las Víctimas del terrorismo en Vascongadas, que todavía están por conseguir una misa funeral por sus familiares caídos, Quizá tanta luz podría deslumbrar a los “fieles vascos” que no condenan el terrorismo y eso pudiera perjudicar a ciertos intereses. No obstante nos queda el Papa Francisco que es y será Fuente de Luz. Así lo creo y así lo espero.
Cada día me gustan más tus comentarios
Saludos
Quiero aprovechar el comentario anterior en la parte en la que menciona a las víctimas del terrorismo etarra y a la postura mezquina y cruel de la iglesia vasca para con ellas. El reciente homenaje al obispo Uriarte, recibiendo el premio de la Fundación Sabino Arana, con una fotografía publicada por la prensa y aparecida en los medios audiovisuales junto a un sonriente, (¿de quién se reirán?, ¿de los muertos de Eta?), Atutxa lo dice todo. Este obispo que pide a Rajoy el perdón para los asesinos de Eta y sus familias, calificándolos de víctimas, es el mismo que nunca jamás tuvo un gesto hacia las otras víctimas, los asesinados por la banda etara y sus familias. La Iglesia del País Vasco tiene su conciencia manchada de sangre y aún hoy es motivo de escarnio y menosprecio hacia los muertos por las pistolas etarras. En sus seminarios nació la serpiente, en sus confesionarios se narcotizaron sus posibles culpas y en sus claustros se escondieron y alimentaros los cachorros del terror. Verguenza debería sentir esta iglesia. Verguenza frente a la infamia y a la abominación.
ResponderEliminarLa Iglesia Católica. como institución, jamás perdonó a "los que nos ofenden" y mucho menos perdonó "a nuestros deudores". Hay que ser muy pobre para saber perdonar las deudas y muy humilde para saber perdonar las ofensas. Ninguna de las dos premisas se da en el "modus operandi" de dicha Institución. Luego las dos formas son completas falacias que estropean una oración que muchos consideran sublime.
ResponderEliminarJerónimo, has destapado la caja de Pandora. Es un tema que siempre tiene diferentes lecturas y que destapa en algunas personas sus deseos de ensañarse con una institución que, queramos o no, lleva más de dos mil años de exitencia y a la que se le reconocen actos y decisiones malos y otros muchos de gran bondad. No voy a enunciar unos y otros, solamente recomendar el arte de la prudencia a la hora de enjuiciar, cosa que parece no primar en los comentaristas.
ResponderEliminarEstimado anónimo de las 13.54:
ResponderEliminarTengo a mi responsabilidad el primer comentario, en el que hago alusión a nuestro Papa Francisco. Confirmo que la Iglesia es una Institución que como todas puede cometer errores y también puede llevar a cabo acciones de extraordinario valor, de no ser así como Ud. Bien dice no habría sobrevivido a los dos mil años. Pero, amigo mío, es hora de ponerse el mono de trabajo y de remangarse y empezar a asumir los errores para poder manifestar los aciertos que son muchos y que, curiosamente, están casi siempre en la “vanguardia”, muy cerca de los desprotegidos y los necesitados (Misiones, hospitales, asilos, colegios, tercer mundo, etc.), por tanto muy alejados de Roma, de su falta de autocrítica y en ocasiones de su opacidad, y por el contrario, en clara , buena y sana competencia con las ONG y con el activismo humanitario.
Los tiempos han cambiado a tal velocidad que quedarse en lo que fuimos (para lo bueno y para lo malo) y no reconocer y entrar de lleno, ya, en lo que somos y habremos de ser, puede suponer el mayor de los descalabros para una institución que pierde muchos soportes, que no está siendo capaz de atraer a otros miembros que no sean los propios de la endogamia en la que se encuentra, y todo ello por no saber acomodarse al cambio.
Sin quitarle un ápice a la importancia que ha tenido y tiene la Iglesia en el desarrollo de lo que hoy en día somos, sin embargo no puedo por menos que insistir en la necesidad del cambio y repetir que La actitud del Papa Francisco es la positiva, acercar la luz y la verdad por mucho que resplandezca una y por dura que sea la otra. No se trata tan sólo de adoptar posiciones similares a las ONG, para eso ya están éstas, que se han hecho con un indudable protagonismo, se trata de dar “A César lo que es del César …”, y no de incompatibilizar y poner en penumbra la Fe y los Evangelios frente a la injusticia, el poder y las riquezas "Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el Reino de los Cielos"
Le agradezco el tono de su comentario y la recomendación a la prudencia, pero quiero insistir en que pese a que pueda haber personas interesadas en el ensañamiento, como Ud. Indica, El ponente ha elaborado un tema que debería dar mucho de si, precisamente para bien de la Iglesia y que, en absoluto, debiera preocupar ni asustar a nadie. Este foro es el que es y cada uno se expresa en libertad y con el debido respeto a lo que piensan los demás.
Saludos.
Manuel Jiménez
En el contexto en el que hablamos por teléfono, añadir que todos los comentarios enriquecen el post. También, si me lo permites, decir que lo de "deudas y deudores", o dicho en el latín de la Vulgata de tu tocayo San Jerónimo, "debita y debitoribus", es un viejo problema que causó dificultades desde el mismo momento en que el de Nazaret lo dejara dicho, recogido más tarde en los evangelios de Mateo y de Lucas, en el Sermón de la Montaña en el primer caso y en el de la Parábola del Buen Samaritano en el segundo. Como decía, desde el principio se creó una gran controversia con esas deudas y esos deudores. Sabía muy bien Jesús de Nazaret lo que decía y era buen conocedor de que causaría una conmoción entre los mercaderes, banqueros, prestamistas y ricos, pero también fue él el que dijo lo comentado por Manuel Jiménez, "del rico y la aguja"..
ResponderEliminarEn resumen, que la Iglesia, o Iglesias, ya que es una oración aceptada generosamente por las Iglesias hermanas como la Ortodoxa Rusa y la Ortodoxa de Antioquía. También por el Protestantismo, todas ellas tienen en su liturgia el Padre Nuestro con sus "Deudas y Deudores".
Has tocado un tema de gran calado y propicio para largas y profundas disquisiciones.
Cordiales saludos.
Es un gran tema, de gran calado y propicio para largas y profundas disquisiciones. Razón tiene Garrido (estupendo comentario), pero contrariamente a lo que se suponía y a lo que vaticinaba el anónimo del día 4 -13,54, ni se ha seguido el tema desde ningún otro comentario, ni se ha destapado la "Caja de Pandora". Valdrá también en este caso aquello de que... "Con la Iglesia hemos topao".
ResponderEliminarSaludos.
"Con la iglesia hemos dado, Sancho...."
ResponderEliminar"Ya lo veo, respondió Sancho, y plego a Dios que no demos con nuestra sepultura...."
El Quijote lo recoge y la pluma de Cervantes lo expone. ¿Era Cervantes anticlerical?. Lo que seguramente era es un atentísimo observador y la iglesia un ente omnipresente que manejaba todos los resortes. Algunas cosas han cambiado pero en pleno siglo XXI, y en nuestra España, muchas siguen igual.