martes, 19 de abril de 2011

Semana de Pasión




    

    Semana de Pasión. Este año ha venido tardía. Conozco la Semana Santa y sus Procesiones, sus Pasos y sus costumbres de Valladolid, ciudad en la que vivo. De León, con una Semana Santa sorprendente y poco conocida. De Zamora, con su austeridad, su Miserere y sus Capas Pardas, que te ponen la piel de gallina. De Segovia. De Salamanca.

    

    Al margen de una visita al Santo Potajero de la Bañeza, mañana Miércoles de Pasión; este año quiero disfrutar de la Semana Santa vallisoletana.

    

    No se trata de poner comparaciones. No es mi intención la de entrar en colisión de sentimientos y vivencias. Para cada cual sus Procesiones y su Semana Santa son las mejores. Y así tiene que ser.

    

    Este 2011 tengo pensado patearme las calles de Valladolid. Hacer una visita a algunos templos en los que los Pasos están preparados para su desfile. Y el Viernes de Pasión, ayudado por ese librillo excelente y exquisito de mi profesor de Historia Moderna de España, Don Javier Burrieza Sánchez, seguir con atención y entendimiento la Procesión General. En los soportales de la Plaza Mayor, exponente modernista del XVI, tengo reservada plaza y silla. Allí, con paraguas o sin el, en esa Procesión General de la Sagrada Pasión del Redentor, se podrá ver lo mejor de la imaginería castellana de Gregorio Fernández, de Juan de Juni, pero también de los Alonso y José de Rozas o de los Bernardo y Francisco del Rincón, maestros que principalmente en el XVI y el XVII nos legaron todo un mundo de sensaciones, interpretaciones y alusiones a las figuras del Crucificado y de su Madre.

    

    Dice el Doctor Burrieza, y con razón, que cuando mejor se puede conocer el alma de esta ciudad es en su Semana de Pasión, ya que en ella se dan cita los sentimientos de un pueblo con las tradiciones que los años han dejado en sus arrugas y cicatrices.

    

    Treinta y dos Pasos, diecinueve Cofradías y una variada y sobrecogedora sucesión de Cristos Crucificados, de Cristos Yacentes, de Madres Dolorosas y de las Angustias, de Ecce Homos, de Calvarios, de Prendimientos y de un sinfín de representaciones sacras procesionales. Un espectáculo "único en su género" y con más de dos siglos de permanencia.  

Escrito por jeronimocarrera el 19/04/2011 12:56 | Comentarios (3)

Comentarios

Mucho me temo que si el tiempo sigue así esta tarde no saldrá la Procesión General de Viernes Santo. La lluvia es enemiga de la madera con la que se contruyeron esos pasos, una buena parte de ellos en el Museo Nacional de Escultura. En muy pocas horas lo sabremos.

Escrito por Cofrade 22/04/2011 16:13

Una Semana Santa pasada por agua y es una lástima. El disfrute de las procesiones y sus pasos nos los hemnos perdido este año.

Escrito por Clara 25/04/2011 15:22

En Sevilla, a donde viajo y disfruto a menudo, esta semana santa ha sido un dolor. Ya se que por esas tierras castellanas es habitual la lluvia en esta época, pero por estas otras latitudes no es así. Un lástima.

Escrito por Noctámbulo 28/04/2011 04:56