lunes, 26 de marzo de 2007

"La tristeza nao tem fin"


Ha nacido la mañana gris y tristona. Una lluvia fina y pegajosa cae lentamente. Desde la ventana del bajo cubierta veo inertes las gruas de la contrucción del Centro Cívico, que el Ayuntamiento ya anuncia pomposamente.

No entiendo la causa de mi desazón. La familia que me rodea está sana y unida. Mi madre, con sus achaques, tiene una vida feliz con sus nietos en Ponferrada. Mis hermanos (los que quedamos), nos queremos y aceptamos sin reservas. Tengo una saluz aceptable, a pesar de los sustos y ventisqueros. Si tomo un papel me sale más de una docena de buenos amigos. ¿ Qué mas puedo desear ?.

"¿ Cuántos montes tendré
que atravezar,
cuántos lagos,
cuántos ríos,
para llegar
a una comarca
donde no tenga
nido la tristeza ?"
"Mi pecho es un cementerio
Mi corazón es un nicho
Si tú mueres primero
Ya sabes cuál es su sitio".

Hace tiempo que no llamo a mi viejo amigo Pepiño, a mi fiel antiguo compañero del seminario José Manuel. ¿ Por donde anda ahora ?. La última vez, y de ello hace más de un año, tenía su ubicación en Sao Luis en pleno centro de Brasil. Tengo una antigua dirección de correo electrónico a la que no contestan. Las cartas me son devueltas sin llegar a su destinatario. Tendré que llamar a la casa central de los Misioneros Comboniamos en Madrid y que me pongan en la buena pista.

Del mazo de amarillentas cartas de correo abro una al azar. Se trata de una arrugada misiva del 2000, salido yo de mis cirugías y mi buen amigo de sus tinieblas interiores. Es mi amigo un buen misionero comboniano que trabaja y sufre en el Mato Grosso brasileño, mezclando sabia y peligrosamente la labor eclesiática con la social. Como dice él, "el alma se sostiene en un cuerpo y éste necesita comer y un mínimo de dignidad". Ésto, tan fácil de comprender, se convierte en un verdadero problema cuando se pronuncia o se practica en un Brasil desigual, diverso y dispar.

Cuenta mi amigo en la carta, con su letra de caligrafía impecable, su diario "quehacer" y sus dificultades con la propia casa comboniana, recelosa de su implicación social con los nativos. Una frase me queda gravada: "Hay días que parecen no querer ser vividos. Hay días en los que la tristeza nao tem fin". 

ESTOY TRISTE, Y MIS OJOS NO LLORAN
"Estoy triste, y mis ojos no lloran
y no quiero los besos de nadie;
mi mirada serena se pierde
en el fondo callado del parque.

¿Para qué he de soñar en amores
si está oscura y lluviosa la tarde
y no vienen suspiros ni aromas
en las rondas tranquilas del aire?

Han sonado las horas dormidas;
está solo el inmenso paisaje;
ya se han ido los lentos rebaños;
flota el humo en los pobres hogares.

Al cerrar mi ventana a la sombra,
una estrena brilló en los cristales;
estoy triste, mis ojos no lloran,
¡ya no quiero los besos de nadie!

Soñaré con mi infancia: es la hora
de los niños dormidos; mi madre
me mecía en su tibio regazo,
al amor de sus ojos radiantes;

y al vibrar la amorosa campana
de la ermita perdida en el valle,
se entreabrían mis ojos rendidos
al misterio sin luz de la tarde...

Es la esquila; ha sonado. La esquila
ha sonado en la paz de los aires;
sus cadencias dan llanto a estos ojos
que no quieren los besos de nadie.

¡Que mis lágrimas corran! Ya hay flores,
ya hay fragancias y cantos; si alguien
ha soñado en mis besos, que venga
de su plácido ensueño a besarme.

Y mis lágrimas corren... No vienen...
¿Quién irá por el triste paisaje?
Sólo suena en el largo silencio
la campana que tocan los ángeles"

( de Juan Ramón Jiménez)


Comentarios

Querido Jerooo!
Hoy estoy reventada tras pasar tooodo el día en otra feria...y no estoy muy inspirada... pero sólo quería decirte que ¡"días como estos los tenemos todos"!, lo mejor es irse a dormir pensando eso de "mañana será otro día! y creer en lo de "todo pasa y esto también"!... frases llanas, sencillas, de la plebe... eficaces como pocas...

Un besito amigo!!!

Yuna, Yuna...., siempre tan cálida, siempre tan cercana ! Ya formas parte de esta etapa de mi vida, así, de puntillas, sin hacer ruido.
Un beso y descansa de ese trajín que te traes.