miércoles, 9 de noviembre de 2011

Olvido

Hay cuatro acepciones principales lingüísticas para el vocablo "olvido":

* La pérdida total o parcial de memoria
* La pérdida de afecto de alguien que llegó a tenerlo por ti
* El abandono consciente o inconsciente de alguien o de algo
* El descuido de lo que debería atenderse



El mayor olvido, el mas cruel y, a la vez, el mas previsible es el de los muertos. En cuanto alguien muere se le olvida. La propia familia intenta hacerlo, para seguir viviendo dicen....
Los versos de nuestro poeta romántico por excelencia, Gustavo Adolfo Bécquer, lo define muy bien:

"No sé, pero hay algo
que explicar no puedo,
que al par nos infunde
repugnancia y duelo,
al dejar tan tristes,
tan solos los muertos"


Yo el olvido lo veo como una lectura interrumpida sin solución de continuidad. Como una cruel puñalada en la desesperanza del que ya no puede defenderse.

Una omisión, un descuido, una relegación.
Una terrible distracción, un cruel abandono, una postergación.
Una indiferencia, una ingratitud, un desprecio.
Una amnesia, un egoísmo, un extravío.

Reconozco tener buen entrenamiento para el olvido. Aún así confieso que me produce ligeras laceraciones el olvido de aquellos por los que luché. Algunos, los menos, a los que salvé del precipicio. Muchos, tal vez demasiados, a los que di muchísimo más de lo que me dieron. Si miro hacia tras el balance es desproporcionado en exceso. Di mucho mas que recibí.