miércoles, 10 de marzo de 2010

Demografia

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He recibido un video YouTube que me ha puesto los pelos como escarpias. Aunque lo he compartido con algunos de mis contertulios internautas, no me resisto a poner su enlace a continación.




Reconozco que ando un poco sensiblón. Después del comentario de nuestro ministro de Trabajo, don Celestino, (¿ qué te pasa Celestino, no habrás perdido el tino ?), mi temor se ha convertido en pánico. Malvivo, como prejubilado tirado a la basura por esa gran empresa que me exprimió mientras fui útil, a la espera de una jubilación que hoy aún no me es posible. ¿ Llegaré a cobrarla algun día ?. Al paso que vamos tengo serias dudas.

Alguien poco sospechoso de politiqueos, como don Pablo Vázquez, Director de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada, (FEDEA), ha publicado un informe demoledor.

Se trata de la reforma ineludible, inexcusable, inevitable, forzosa y necesaria de las pensiones. Del Sistema Público de Pensiones. Ese buque insignia al que nos hemos aferrado como garrapata a las nalgas del chucho y que, según los expertos, empieza a hacer aguas. El buque es hoy un barco destartalado, medio fantasma, abandonado por el capitán y la marinería.

¿ Tiene todo este embrollo una solución viable y realizable ?. La tiene, pero como si no la tuviere o tuviese, (o como diría un vasco "como si no la tendría"). ¿ Cual es esa solución o arreglo ?. Cambiar radicalmente la demografía.

Estamos a la cola de la Europa comunitaria en cuestiones de tasas de fertilidad, con 1,1, por detrás de Italia con 1,2 y del resto de paises europeos. Esta situación hace inviable cualquier arreglo al respecto.

Y claro, si los españoles somos infértiles o pasivos en crecimientos demográficos, nos quedaría única y exclusivamente la inmigración. Pero no una inmigración de cupos, nada de eso. Serían precisos exactamente 31,28 millones de inmigrantes en edad de trabajar, dados de alta en la Seguridad Social. A esa cifra habría que sumar a sus familias y ello nos llevaría a un callejón sin salida.

No, no lo he olvidado. Antes de los inmigrantes deberemos tener los puestos de trabajo y con 4.048.493 de parados, al cierre de enero, (la cifra de febrero va a sumar cerca de 200.000 más), esta solución no nos vale.

¿ Qué nos queda ?. Nada, no nos queda nada. Nos queda el abismo de la fragmentación de eso que se ha dado en llamar el "estado del bienestar". Aquel que se haya pagado una pensión privada la cobrará y el resto nos iremos a los comedores sociales. A buscar en las papeleras y en los contenedores de basura de los supermercados. ¿ No había dicho ya esto antes ?. Creo que si.

Bueno, nos queda una solución, siempre y cuando consigamos que Europa no nos eche del euro, cosa totalmente previsible por mucho que nos parezca irrealizable. Se trataría de que cada española, en edad de procrear, pase a tener un mínimo de 5,1 hijos cada una. Es una solución a medio y largo plazo. Y a mi no me vale. Para entonces yo ya no pinto nada y si no me vale, pues qué queréis que os diga, que me da igual. Si, hombre, que me da lo mismo. Que se vaya todo al carajo de una puñetera vez.

Y ya para terminar esta perorata, ¿ qué inmigrantes nos serían más adecuados ?. Yo prefiero a los hispanoamericanos. Per eso de la lengua, la cultura y porque son sangre de nuestra sangre. Y si esto no fuera posible, pues a los chinos. Primero porque ya están aquí. Son discretos, pulcros y nada propensos a los hospitales, (¿ cuantos chinos habéis visto en los hospitales de nuestra maltrecha Seguridad Social ?).

A mi, por mucha cultura referida al viejo Al-Andalus que se quiera, los moros me dan mucho miedo. Yo soy hijo de los visigodos empujados al norte y no se trata de empezar otra reconquista.

En serio, estoy acojonado. Tengo un pavor y desasosiego que no me dejan vivir.

Comentarios

Estoy de cauerdo Jerónimo. Nos has hecho un resumen acertado de los que está pasando y de lo que nos espera. Te felicito

Jerónimo, ne me seas tan pesimista, hombre. ¿ De verdad crees que se nos va a caer todo este edificio tan querido de nuestro sistema público de pensiones ?. yo quiero creer que no, aunque nos tocan vivir tiempos oscuros.
Como siempre, como nos tienes acostumbradas/os, sabes utilizar las palabras y los tiempos.
Hablando de palabras, ya sabrás que se nos ha ido don Miguel Delibes. Nos has comentado que es un escritor de tus preferidos. A mi tambien me gusta. El uso que hace (ha hecho) de la lengua castellana es emocionante.
Un besito y gracias por entretenernos y seducirnos (al menos a mi) con tu prosa

No se...La idea de Manqueospese, me suena a la España de los años 50, pero me temo que ya no hay Alemanias ni Suizas a las que ir y tanto a Jerónimo como a mi, no creo que estemos ya para salir fuera y encaramarnos al andamio, que en el fondo es lo que hicieron aquellos en aquellos años...¡Jeronimo, sigues lucido!, muy lucido y acertado en tu analisis, si nuestros politicos aprendieran algo de ti, aún quedaria esperanza...

Excelente visión de lo ocurre... y lo que es mejor... bien contado.

Queda otra salida. Ser nosotros los inmigrantes en un tercer país, en el que tras años de trabajo, mejor remunerado que aquí, nos permita, bien con nuestros ahorros, bien con el sistema de pensiones de ese país, pasar tranquilo la jubilación.

Un saludo.

Como dicen los comentaristas es una visión inteligente y bien contada, pero yo creo que un poco pesimista. Yo creo que tiene que existir una solución, una salida. No me creo que todo el país y su futuro se nos vayan al retrete.

Ya veo que has estado muy activo en el blog. Has tocado muchos palos y con buena mano. En lo que se refiere al tema de las pensiones somos legión aquellos que tememos que el sistema público llegue a perdurar en el tiempo. Tal vez nunca como ahora hemos tenido esa sensación de peligro. Ojalá estemos equivocados.