El estallido vecinal y social ocurrido en Burgos, en su barrio del Gamonal, me ha hecho recordar una planta de tallo largo y flores blancas que veía en los campos de mi pueblo.
Con seguridad el "Barrio del Gamonal" de Burgos proviene de un espacio en el que eran abundantes los gamones. Esa planta se usaba, creo recordar, como alimento en épocas de hambrunas y también como divertimento. Su bulbo secado al fuego, al golpearlo contra una piedra, producía un sonido similar a un disparo. Se dice que, sabedores de esta peculiaridad, en algunas poblaciones se usó con éxito para amedrentar a los franceses en su napoleónica invasión peninsular. Aquellas "tracas gamoneras" infundían temor a los gabachos y en algunos casos, como parece ser el de Ubrique, impidieron su asalto invasor.
Quién sabe si los vecinos del Barrio del Gamonal de Burgos han utilizado esta treta para pararle los pies a su alcalde, Javier Lacalle, un niñato prepotente y pagado por los caciques del lugar.
Lo que no cabe duda es que los vecinos le han "echado gamones"....
En mi pueblo y en algun otro el gamón se lllama también la vara de san José. En las imágenes del sufrido esposo de María de Nazaret siempre aparece con su dichosa vara florecida. Siguiendo tu análisis también podríamos decir que los vecinos del Gamonal le dieron una buena vara al alcalde. Sigues con tu humor fino y con tu pluma dispuesta, campeón (como dices tú).
ResponderEliminarEn mi pueblo y en algun otro el gamón se lllama también la vara de san José. En las imágenes del sufrido esposo de María de Nazaret siempre aparece con su dichosa vara florecida. Siguiendo tu análisis también podríamos decir que los vecinos del Gamonal le dieron una buena vara al alcalde. Sigues con tu humor fino y con tu pluma dispuesta, campeón (como dices tú).
ResponderEliminarHay muchas lecciones que se pueden sacar de los acontecimientos del barrio de Gamonal de Burgos y no sólo los que ponen a los manifestantes y forofos como los ángeles del paraiso y al alcalde y gobierno municipal como los demonios del infierno. En mi opinión el hecho en si mismo tiene una gravedad enorme. El que un grupo mayor o menor de manifestantes, quemadores de mobiliario urbano y en algunos casos vándalos y violentos, consiga revocar una acción, nos guste mas o nos guste menos, totalmente legal y que iba en el programa municipal de las elecciones, es grave y crea adición. No hay más que observar el llamdo "efecto contagio".
ResponderEliminarEn cuanto al alcalde, que es verdad que tiene pinta de niñato, se equivocó al no escuchar a las agrupaciones vecinales, se equivocó en sus mensajes y sobre todo se equivocó bajándose los pantalones. ¿Qué es eso de que "la paz social es más importante que la legalidad"?. Por esa regla de tres podemos dar por buernos los atentados de Eta, las atrocidades de Alquaeda y todas las violencias que se produzcan.
La legalidad es sagrada y debe defenderse si no se quiere entrar en un estadio de violencia e ilegalidad.
En resumen, por una vez y sin que sirva de precedente, no estoy de acuerdo contigo Jerónimo
ResponderEliminarDe nuevo un tema candente y de especial polémica y debate.
ResponderEliminarEs verdad. Lo que pasa en Burgos es algo que ya nos empieza a pasar a todos. Las ganas de gritar, de hacerte escuchar y de que, de una vez por todas, nuestros gobernantes dejen de mirarse a su puñetero ombligo y empiecen a ver cómo nos va a los que tenemos que soportar sus negligencias, sus egoísmos, sus asquerosos sobres llenos de impudor y desvergüenza, sus mentiras, los enchufes de sus cónyuges (algunos hasta en tres consejos de administración a la vez, repartiendo información privilegiada a diestro y siniestro) , o sus interminables recortes a los que no tenemos la mínima posibilidad de contestar. Todas estas cosas, o sea la CORRUPCIÓN, hacen que , a priori, nos pongamos de acuerdo en que hay que estar departe de los del Gamonal, incluso visto que no se hace caso de nada, que no quieren mirar ni conocer cuál es el día a día de los desafortunados , de los parados, de los que tiene que vivir de la caridad de la familia y que amparándose en la democracia (a la que no respetan y desprestigian) tratan de imponer la Ley con la ayuda de los ”Maderos” y no con la del “Buen gobierno”, conculcando el derecho a decidir por ostentar la representación de quienes, precisamente, les demandan una acción contraria a la que tratan de imponer; sólo nos queda el grito y la rabia, y cuando esa rabia no se puede canalizar de la forma adecuada, fácilmente, se puede convertir, aún sin más justificación, en violencia.
El “Mal gobierno” nos puede llevar con relativa facilidad a suplantar a las instituciones ya que cuando éstas no son la causa de nuestros problemas colectivos, desde luego tampoco aportan ninguna solución, y es entonces cuando nos preguntamos para qué sirven y se nos desmorona todo, incluso el llamado “Orden establecido”, y cuando eso ocurre basta una chispa para alterar ese orden o cambiarlo por otro diferente, para pasar de lo responsablemente correcto a lo meramente impulsivo, sin mirar otras consecuencias. Cuánto mal lo deben de estar haciendo para que alguien de entre los que protestaban con “Gamones o gamonales” pudiera decir lo siguiente: “Cuando se haya parado el bulevar ya veremos qué hacemos con el dinero”. Sinceramente, creo que es preocupante que la gente piense que se puede suplantar en la toma de decisiones a las Instituciones, al Ayuntamiento de Burgos legítimamente establecido y representado y a todo lo que hemos generado y creado a base del esfuerzo y sacrificio de muchas generaciones de españoles.
Deberían de darse cuenta que no sirve con crear una Ley que les proteja de la protesta, de los escraches y de la rabia de los ciudadanos, porque llegará el momento en que ni la Ley, ni todos los “antidisturbios” de este país podrán parar la indignación que genera la corrupción y el pasotismo de nuestros “Ilustres”. La solución está en trabajar más, con toda la dignidad y responsabilidad que merece el cargo que se ostenta y pensando solamente en el bien de la Comunidad que es para lo que se está y por lo que se ganan el sueldo. Sería importante para los intereses de todos que el Sr. Alcalde dejara al margen protocolos e intereses de partido, incluso el orgullo propio de lo que representa e hiciera un ejercicio de acercamiento a los ciudadanos y tratara de explicar de forma directa y efectiva el porqué de su postura.
Saludos.
Parece que hemos olvidado que el anterior y conocindo alcalde de Burgos y antes ministro J.Carlos Aparicio, del PP, bueno realmente en Burgos todo parece ser del PP y de la derecha derechona, como decía, Aparicio se vio obligado por las presiones de los vecinos a abandonar la pretensión de hacer un macroparking en ese barrio del Gamonal. Parece que los poderes politicos y empresariales le tienen echado el ojo al barrio y a sus posibilidades de ganar dineros a costa de los vecinos, en su casi totalidad trabajadores y ahora parados.
ResponderEliminarEl partido de los Populares que gobierna en Burgos en su ayuntamiento, en la comunidad, en la provincia y en la nación, se ha llevado un revolcón y el miedo al efecto contagio parece haber puesto nerviosos a unos y a otros. Ahora que se quería sacar pecho y vender una recuperación económica vienen los Gamonales, las Leyes del Aborto y encienden un fuego en un pinar reseco, lleno de parados y ya hasta las narices cabreados ciudadanos. Hay que ser muy torpes, señores de la derecha, muy torpes y muy prepotentes.
El estallido de Gamonal no es ningun montaje de antisistemas. Es un barrio pobre y cabreado ante el abuso continuado de una ciudad de caciques. Seguramente si buscamos nos costará encontrar una ciudad más atrapada en las garras de cuatro caciques.
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