martes, 16 de julio de 2013

Fárragos




"Más valen quintaesencias que fárragos". 

En 1647 Baltasar Gracián, aquel jesuita sabio y mordaz, dio un salto enorme del hombre moderno al hombre barroco. Sus obras "El arte de la prudencia" y "Oráculo manual" salieron de las fronteras de aquella patria hispana y se asentaron en otros países, principalmente en Francia, (Pascal, Rochefoucauld y otros).

A día de hoy sus obras han resistido el paso del tiempo y han marcado la literatura, en muchos casos sin citar la fuerte, de toda esa amalgama de obras americanas sobre el éxito en las empresas o en la vida del individuo.

¿A qué viene todo este preámbulo?. Viene a que este desnortado y confuso blogero ha perdido la noción de la diferencia entre la verdad y la mentira. Es tanta la basura mediática, tantas las noticias y tan grandes las cloacas del mundo que nos rige, nos regenta y subciona que estoy a punto de entrar en estado de coma vegetativo e irreversible.

6 comentarios:

  1. ¿Me dejas que cite yo también?.

    "Ni al justo leyes ni al sabio consejos"

    Formidable en su brevedad, amigo jerónimo

    Saludos

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  2. ¿Sabes?...tengo un amigo que cuando va a por la prensa la pide como ...¡Deme 1,50 euros de mentiras!...y no anda descaminado.

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  3. Yo vivo permanentemente en estado de shock. He acudido a urgencias hospitalarias y no encuentran nada. Me dicen que lo mejor es que abandone el pais y respire aire fresco. No sé, tal en las islas Fiji

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  4. Estoy de acuerdo con el anónimo anterior “Lo mejor es que abandone el país y respire aire fresco”. La mentira no tiene porqué ser la noticia, todo lo contrario, la noticia cuenta la mentira. Lo que pasa es que son tantas las mentiras que nos cuenta la noticia, que tendemos a pensar que la propia noticia es mentira.
    Vivimos una época en la que ya no vale el engaño, al final todo se sebe. Sin embargo nos engañan, nos engañan y nos siguen engañando, y mientras sigamos en una actitud como la que tenemos (asunción, resignación, ajo y agua) nos veremos los unos a los otros la carita de tontos cabreaos con la que nos quedamos después de leer y conocer la noticia, y mientras otros piensan que han hecho lo mejor para todos y todas pero pasando primero por sus bolsillos.
    Estos días nuestro querido ministro de industria se siente eufórico porque ha reducido la subida de la luz del 40% al 3,5%, sin embargo no dice que lo ha hecho a expensas de cargarse toda la dignidad de que pudiera estar investido. Nada se dice de que tras su gran reforma deja hundidas en el ENGAÑO y quién sabe si en la miseria a un montón de familias (50.000) que un buen día tuvieron a bien confiar en el Estado; me refiero a todos aquellos que como yo invertimos en energía renovable (CON LA GARANTÍA DEL ESTADO). Fuimos llamados para invertir nuestros ahorros en un proyecto catalogado de prioritario por el Gobierno de Aznar y continuado por el de Zapatero, que resolvería la dependencia energética y haría que España se colocara en la cúspide de los países productores por su sol y sus posibilidades; por tanto sería una inversión segura al servicio de todos, al servicio de nuestro país.
    Hoy somos la principal causa del despilfarro y del lastre que acumula el sector energético, hoy se nos criminaliza frente a la opinión pública y hoy parece que se olvida la seguridad jurídica y que el Estado es el único responsable –por acción y por omisión. Se nos echa la culpa y se nos trata como a verdadera basura, se elimina la prima sobre la producción y se nos dice que nos darán el 7,5% de rentabilidad sobre nuestra inversión( sin entrar a considerar el tiempo de la amortización de la inversión), “Rentabilidad razonable” dice el personaje, sin tenernos en cuenta , sin haber pedido nuestra opinión y sin saber que no puede tirar por la borda ni nuestro dinero ni el del Estado; de modo que si mi instalación produce me dan el 7,5% y si no produce también. Lo que no nos cuentan son los trapicheos de las grandes centrales energéticas que con una mascarilla de 1.000 M de recorte piensan que han cumplido, esas que pese a todo siguen repartiendo grandes dividendos, esas que con las subvenciones y con las prebendas del estado hacen que la luz en este país sea la más cara de Europa, esas mismas que mantienen en sus sillones a expresidentes y exministros para blindarse y seguir succionándonos nuestras mermadas fuerzas para conseguir sus fines.
    El caso es que caímos en la trampa, una trampa puesta por nuestro propio país, por mi Patria… esa a la que un día juré entregar hasta la última gota de mi sangre. ¿Pero cómo puede ser que todavía estos individuos presuman y hagan como que conservan “LA DIGNIDAD” que hace falta para ser hombres libres y dedicarse a la política?.
    Los españoles terminaremos contando por estafas los días de esta asquerosa crisis que no es sólo económica y que no ha venido sola, ha venido del robo planeado y organizado de quienes nos gobiernan o nos han gobernado. El otro día las jubilaciones y la reforma laboral, ayer las preferentes, hoy las energías renovables, mañana… ¡Cualquiera sabe!.
    Saludos.

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  5. Conviene saber que en esta ocasión les ha tocado el engaño y la estafa a los de las renovables, pero el Gobierno ha roto la SEGURIDAD JURÍDICA de este país. Una vez metidos en “brea” ya les da lo mismo 20 que 50; habrá que pensar en ir quitando todas aquellas inversiones que estén garantizadas por el GOBIERNO DE ESPAÑA.

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  6. Estamos en un momento en el que los acontecimientos y noticias de nuestros políticos y la basura mediática que nos llega han convertido a nuestro pais en un basurero. No nos lo merecemos. No nos merecemos un gobierno como el actual pero tampoco una oposión como la que tenemos. Unos, aferrados al poder, otros en la oposición, intentando ganar lo que las urnas les negaron. Y luego están los intereses partidistas, solamente pendientes de sus temas y sus diferencias.

    Yo creo que en vez de marcharse tenemos que luchar. "Si vis pacem, para bellum": si quieres la paz, perpárate para la lucha (guerra). Son tiempos de plantar cara. Tiempos de mantener el tipo y no permitir que nos destruyan lo material y lo inmaterial.

    Saludos, amigo.

    Saludos

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